Visitar Corippo, un diminuto y mágico pueblo suizo

En el mundo podemos encontrar múltiples sitios con entornos misteriosos y que los envuelven de magia, tal es el caso de un pequeño e interesante pueblo situado en Locarno, en Suiza, hablamos de Corippo.

Corippo es un pequeño pueblo que se caracteriza por algo muy particular, y es lo justamente lo diminuto que es, siendo tan solo un pequeño puñado de casas fabricadas en base a piedra gris, y contando con techos de pizarra negra, además, se encuentran agrupadas y escalonadas debido a su ubicación.

El pequeño pueblo se encuentra trepado a una gran pendiente de una montaña, pero no solo eso, sino que además, en este diminuto poblado de Suiza, en 2010, la población era de 12 habitantes, curiosamente, la espectacularidad de este pueblo, que es sumamente bello y situado al pie de una montaña, envolviéndose de magia y misterio, es que además, su pequeña población explota el turismo.

Y es que Corippo hasta dispone de un pequeño sitio web donde podremos apreciar la espectacularidad de sus alrededores montañosos, de sus increíbles pastizales, y de la maravillosa ubicación en que han emplazado el pueblo.

Este pueblo, más allá de ser una región verdaderamente paradisíaca, dispone de su propio escudo nobiliario, así como también cuentan con Iglesia y Restaurante, además de contar con su propio alcalde, siendo curiosamente el pueblo más pequeño de toda Suiza.

Corippo está ubicado en el Valle Verzasca, que se encuentra a tan solo doce kilómetros de la ciudad de Locarno, situándose además al norte del Lago artificial de Vogorno, estando además muy próximo a la frontera de Suiza e Italia, a unos 20 kilómetros.

Además, no solo cuenta con la magia que nos otorga la pequeñez, simpleza y hospitalidad de sus habitantes, ni tampoco con el impresionante paisaje de sus alrededores, sino que además las casas están fabricadas con materiales locales, como lo es el granito Ticino, que les ha permitido conservar el aspecto de sus casas tal cual se encontraban hace varios siglos atrás.

Para hacernos una idea de la antigüedad de este pequeño pueblo, debemos mencionar que su Iglesia (Bendecida Virgen Annunciata) fue construida en el Siglo XVII, siendo extendida un siglo más tarde, y no solo eso, sino que además, durante el año 1975 fue declarado como un Patrimonio Europeo.

Si deseamos visitar este pequeño pueblo deberemos hacerlo por una carretera llamada Verzasca Valley, la cual fue construida precisamente para facilitar un poco el acceso a Corippo, ya que se encuentra en una ubicación a la que es difícil llegar, sin embargo, la belleza del lugar, y la paz que envuelve este sitio es única y valdrá la pena una aventura.